Leviathan...

Desde hace unos meses una cinta rusa ha estado llamando la atención en diversos festivales al rededor del mundo, más lo hizo cuando fue galardonada con el Globo de Oro a la Mejor Película de Habla No Inglesa, y por si no fuera posible, generó más ruido cuando se anunció su nominación al Oscar como Película Extranjera y su posible triunfo.

Leviathan, que mitológicamente y de por decirlo de manera "simple" es un monstruo creado por Satanás, el director  aquí nos muestra la vida de un hombre Kolya, que vive con su mujer Lilya muchos años más joven que él y su primogénito, fruto de su primer matrimonio Roman.

Estos tres personajes viven en la costa del ex país socialista y esperan la llegada de Dimitri, un compañero de colegio de Kolya, ahora abogado en Moscú. 

La visita llegará a apoyar a su amigo en un tema legal ante el gobierno que quiere demoler su domicilio por la ubicación.

La cinta cuenta con muy buenos actores, obvio son poco o nada conocidos en México. Estos rusos le imprimen fuerza y tristeza a sus interpretaciones, la verdad es de esas cintas donde, sin doblaje nos expresan el sentimiento por el cual están pasando.

Un joven adolescente atormentado.
Una mujer sumisa e insatisfecha.
Un amigo que desea apoyar pero, es traicionero.
Un gobierno que simplemente esta en tu contra... Eso es lo que tiene que soportar Kolya en esta cinta.
Me gustó mucho que te hace sentir ese sentimiento de impotencia, de ira, de que no crees posible que todo te esté sucediendo en el mismo momento y que, desafortunadamente, todo parece estar en tu contra.

Otro atino, es que no cae en clichés dramáticos, las cosas suceden y sí, duelen, pero la vida debe seguir.

Considero que lo que la hace tan especial son además de las actuaciones, la fotografía que simplemente es artística, el ritmo de la película es como las de arte hechas en Polonia o Dinamarca, cintas con escenas largas y tomas fijas. No significa que sean malas, pero en ocasiones nos dan la sensación de eternidad que no siempre es un resultado favorable.

La música, actuación, ambientación y trama hacen de esta una cinta artística.
Esta cinta nos da una moraleja, las decisiones que tomamos debemos hacerlas con base a hacer las cosas bien y estar en paz o hacer las cosas dejándonos llevar por el coraje.
Creo que de ahí se puede derivar el título, dejar salir al monstruo que llevamos por dentro o luchar contra él, aunque el mundo entero se nos caiga encima.

Muy buena película, muy posible ganadora del Oscar, aún por encima de Relatos Salvajes, la cual es extraordinaria, pero no hay punto de comparación, ambas una muy buena muestra de cine internacional.