Los 33...

Chile vivió un episodio bastante dramático hace 5 años, cuando un grupo de mineros quedo atrapado a más de 500 metros de profundidad, con muy pocas posibilidades de ser rescatados por el terreno en el cual se encontraban y lo inestable de la tierra.

Este suceso fue noticia en todo el mundo, las familias de los mineros no se dieron por vencidos y con la ayuda del gobierno chileno, preocupado también por como quedaría parado ante el mundo, en caso de no hacer nada, deciden hacer muchos intentos para llegar a los mineros.

A 69 días de haber quedado atrapados en la mina, la noticia de haber dado con ellos y de la sobrevivencia de estos hombres, conmovió al mundo entero.

Un lustro después la mexicana Patricia Riggen, que dirigiera antes "Bajo la misma luna", trae ahora este evento para la pantalla grande.
Rodeada de un elenco multinacional como los españoles Antonio Banderas y Mario Casas, este último estando en la cúspide de su carrera en España, los mexicanos Kate del Castillo, Adriana Barraza y Tenoch Huerta, entre otros. 
El brasileño Rodrigo Santoro, la francesa Juliette Binoche, el irlandés Gabriel Byrne, el famoso actor de "La Bamba" Lou Diamond Phillips de Filipinas y la chilena Cote de Pablo.

Tantos nombres y una historia igual de conocida dan como resultado una cinta palomera, cumple con la idea de poder sentir lo que las familias y los mineros pasaron durante esos días de espera e incertidumbre.

Los efectos especiales cuando sucede el derrumbe están muy bien, nos hace estremecer.
Sin embargo, siento que todo fluye demasiado fácil, no hay mucho esfuerzo, todos cooperan, todos aceptan las reglas, como si las cosas hubieran sido demasiado fáciles para todos los involucrados.

No hubo un momento de desesperanza, y eso que llevaban 60 días encerrados, salvo un alcohólico, pero esa reacción fue más por la falta del vicio que por la idea de quedarse enterrados.

Aunque sabemos como termine, es emotivo ver el rescate y todo lo que tuvieron que maniobrar para llegar a ellos.

Cumple con narrar una historia real, pero me queda a deber emoción. 

Revancha.

Antoine Fuqua director de "Día de Entrenamiento" y "El Protector" ambas estelarizadas por Denzel Washington, ahora nos presenta otra cinta que mezcla drama y acción: "Revancha" (Southpaw).

La historia se centra en Billy Hope, un luchador profesional que lleva más de 40 peleas invicto, él tiene todo bajo control hasta que un incidente cambia su vida por completo, perdiendo al ser que mas ama, su prestigio y hasta la patria potestad de su progenitora.

Ahora, no sólo no tiene nada ni a nadie, sino que tiene que recuperar a su hija, que esta en custodia del estado. 

Es entonces cuando Billy con la ayuda de Tick Willis, un entrenador retirado de los reflectores, hacen la mancuerna perfecta para aspirar a devolverle a Billy lo que le pertenecía.

La cinta tiene buen ritmo, la trama no ofrece nada nuevo, ya que en mayor o menor medida es algo que ya hemos visto en cintas como "Million Dollar Baby", "El Peleador" o incluso "Rocky", donde la trama gira en torno a tocar fondo para poder salir adelante no sólo con esfuerzo físico sino con entrega y pasión.

Todo esto con la ayuda de alguien que esta retirado y prefiere vivir en las sombras, por un suceso o traición que le quito toda esperanza. Sin embargo, no le quita lo profesional y la experiencia que tiene sobre el ring.

Jake Gyllenhaal es Billy, este actor que ha transformado su actuación y su cuerpo desde Donny Darko, Brokeback Mountain hasta Primicia Mortal, ahora sacrifica unos cuantos kilos para adoptar el cuerpo de un luchador de primer nivel. Se ve el trabajo físico del actor y además su interpretación como un hombre al limite es efectiva y creíble.

Rachel McAdams en su papel de esposa, amable, linda y quien tranquiliza al luchador, cabe mencionar que la actriz luce cada vez más guapa.

El gran entrenador que ayuda a Hope a salir adelante es el ganador del "Oscar", Forest Whitaker, un actor serio y sensible, que sin duda es un atinó en la cinta.

Aunque sabemos como terminará, la cinta nos envuelve, nos permite querer ver el final que esperamos, en momentos se hace un poco lenta, pero en general la cinta esta bien elaborada y contiene buena dosis de acción.

Algunas escenas sobre el ring están muy bien manejadas, si eres fan del box las amarás, si no lo eres, te hará sentir la agresividad que se vive en estas peleas en el mundo entero.

Nuevamente, agradezco que no haya escenas de sufrimiento prolongado, si bien, de repente siento que pierde muy fácilmente todo, conforme transcurre la primer mitad de la cinta, ya adapta otro ritmo y más sentido.

Aún está en cartelera, recomendable para pasar un buen rato, viendo golpes, sangre y algo de tensión.